DIVULGACIÓN
A propósito de la desescalada, estos días se está hablando mucho de la responsabilidad de los ciudadanos. Está muy bien reclamar cordura y colaboración a la ciudadanía, pero también resulta oportuno recordar que la responsabilidad individual debe completarse con la responsabilidad social en materia de salud. Los ciudadanos no son los responsables únicos de su salud. No siempre tienen la posibilidad real de elegir estilos de vida más o menos saludables y / o disponen de los medios. Pensemos, por ejemplo, en la falta de máscaras para todos o en las dificultades para acceder a espacios comunitarios donde guardar adecuadamente la distancia social. Hay que desarrollar actividades sociales orientadas a generar aquellas intervenciones que permiten transformar, en un sentido favorable para la salud, las condiciones del medio ambiente, laboral o de vida de los grupos humanos. La educación para la salud puede ayudar a los ciudadanos a adoptar y mantener hábitos saludables, a hacer un uso responsable de los servicios de salud, y a tomar decisiones individuales y colectivas, con el fin de mejorar el estado de salud y del medio donde viven. Habría que ir pensando, también, en más iniciativas y programas de educación que nos ayudan en la lucha contra el coronavirus y a defendernos de posibles infecciones
Actividades de la Cátedra Carmencita
El presente y futuro de La Vall de Laguar a debate: las conclusiones de las Jornadas de Turismo Cinegético
Cadena SER. 20 de diciembre, 2023
IV Ciclo Gastronomía vino y cine
Sede UA Ciudad de Alicante, 7 y 8 de septiembre 2022
Jornadas para la inserción laboral de trabajadoras con discapacidad
Sede UA Ciudad de Alicante, 7 y 8 de septiembre 2022